© de la imagen La meva maleta

sábado, 16 de octubre de 2010

Sólo palabras

Cuando hablo de ti, de mi relación contigo desde tu enfermedad, siempre digo que luchamos juntas, que yo te apoyaré, que lloraré contigo...  Pero no es verdad. Claro que quisiera poder cargar parte de tu dolor, claro que me gustaría ser tu alivio. Pero son sólo palabras.
Cuando se apaga la luz de tu habitación quedas tú sola, con tus miedos, con tu dolor, con tus angustias, y tus fantasmas reales, y soñados. Te debe reconfortar cuando oyes palabras de aliento, pero tú y yo sabemos, que, en el fondo, ésta es tu guerra, y nadie más que tú puede lucharla, sino tú. Y que tu espíritu valiente te ayudará a mantener tu cuerpo más fuerte en el proceso, pero que no te curará.

Tengo miedo, no quiero que estés enferma, no quiero que sufras. Y no puedo hacer nada, más que sonreírte y rezar.
Maldita sea.

9 comentarios:

Driver dijo...

GAVIOTAS QUE REZAN.

Si le preguntas a las gaviotas por las leyes que rigen la aeronavegabilidad, ninguna te responde. Resulta imposible entablar con ellas una conversación sobre las leyes de Newton.

Son gaviotas.

Pero si te acercas al atardecer a cualquier puerto de la costa, puedes aprender a rezar.
Es cuestión de mirar detenidamente....

Cuando la Gran Bola Amarilla roza la línea del horizonte, estas aves se sitúan en las barandillas de los paseos, en los mástiles de los veleros, y esperan.

Las masa de aire recalentadas por el poniente dejan espacio a los frescos volúmenes de las capas altas de la atmósfera; corre el viento fresco del atardecer.

En esos momentos, las gaviotas rezan.

Alzan el pescuezo, sienten la brisa, y tras una jornada donde el Creador les ha regalado vida y alimentos, extienden sus alas, se dan impulso y vuelan majestuosamente.

Trazan sobre el puerto trayectorias de agradecimiento, círculos de respeto, espirales sentidas.

Son justas con su Creador....

Las buenas gaviotas son libres.
No dejan de rezar ni un sólo día.

sunsi dijo...

Bufas, pesoleta... Driver ha escrito en tu blog su mejor cuento... mi preferido.

Quería decirte que te sigo, que estoy aquí... tampoco sé si es efectivo,pero lo que sí sé es que quiero que sea reconfortante, como si te derramaras en un colchón mullido.

Besos, Princesa. Contigo cuando hay dolor y cuando hay alegría...

La mesa camilla dijo...

Fuerza y coraje!

Mariapi dijo...

Ana, no son sólo palabras. Es cierto que en último término cada uno nos enfrentamos a la ontológica "soledad humana", pero del mismo modo somos capaces de esa cominicación íntima que es el amor... y que transforma hasta las mayores desgracias, y palparlo, notar que amigas como tu estáis cerca, cambia la oscuridad de la soledd y disminuye la intensidad del dolor y el miedo. Y no son palabras. Es la realidad que somos.
Un besico.

Ana, princesa del guisante dijo...

*Driver: Lo dices de forma que parece fácil: dejarse llevar, sin perder de vista la luz, y no olvidar quién nos ha puesto aquí. Gracias por la historia. Un abrazo, buen hombre.

*Sunsi: el milagro, como con la historia de las gaviotas es que al mismo tiempo que mi amiga sufre tantísimo dolor, pasan cientos, miles de cosas buenas en todas partes. ¿Cómo enfadarse? Gracias por el apoyo incondicional. Un beso, guapa.

*Laura: gracias por estar ahí. Un abrazo.

*Mariapi: me consuela tu presencia silenciosa y tu oración, que siento casi en mi mesilla de noche cuando se apaga la luz y me acechan mis fantasmas. Un beso, guapa.

TC dijo...

Yo no estoy de acuerdo en que no puedas hacer nada. Entiendo que no tienes una varita mágica para curarla, pero el apoyo incondicional, como el que tu demuestras día a día que la quieres, alimenta su alma, y le da fuerzas para seguir luchando.

Mucho animo para las dos! Un abrazo

Carme Sala dijo...

Quizás sólo puedas ejercer en el frente de avituallamiento, en esta guerra, pero tu papel es imprescindible.

Ánimos...no sólo desde el frente, se lucha...aunque es cierto que éste es el peor sitio.

Petons,
Carme

Marta piesdescalzos dijo...

Sonreírle y rezar es mucho Pesolet! son más que palabras, que también son mucho porque son sinceras. Besos

Ana, princesa del guisante dijo...

*TC: Cuando intento ponerme en su piel, cosa que no es fácil, me doy cuenta de cuánto sufre, y me siento torpe por no poder hacer nada. Un abrazo, y gracias.

*Mevamaleta: no quisiera tener que luchar, ni verla a ella en el frente. No podemos elegir. Un petonet, bonica

*Marta: ojalá mis palabras y mis sentimientos bastaran para mejorar... un beso

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

Por favor,

Si algo de lo que expongo aquí te molesta, te pertenece, o habla de ti y quieres que lo borre, tan solo tienes que pedírmelo. Nunca quise ofenderte, ni plagiarte, ni molestarte...
Este es un espacio de libertad y, sobre todo, de respeto.