© de la imagen La meva maleta

jueves, 7 de abril de 2011

La voz interior

Ha sido una locura de día. He soportado el peso de mi propio cuerpo, la carga de mis obligaciones laborales, el bullir de los nuevos proyectos, las inagotables tareas domésticas.

Sólo recuerdo que he estado corriendo todo el tiempo de un lado al otro. Escuchaba a la gente quejarse del fresco de la mañana, o del calor de mediodía, y entonces me daba cuenta de que yo había estado corriendo, sin fijarme en el precioso día de primavera.

Puesta a punto en la peluquería, deberes, plancha, mientras intentaba consolar a mi hijo a quien habían metido arena en los ojos. Los deberes propios, echar un cable a una compañera que ha olvidado sus libros, la comida de mañana, la cena. Pensar en el post.

El post.

Para escribir hay que escuchar la voz del interior del alma, y ahora lo único que escucho es el rugir del lavavajillas que acabo de encender, mientras la cocina sigue oliendo al pimentón que adornaba  nuestros paladares. Bendigo este lugar, este remanso de paz de mi castillo, porque me obliga a reflexionar para contar.

¿Ha sido un buen día? No lo sé, ahora lo voy a descubrir. Déjenme que lo piense... son las 9, me quedan un par de horas.





(*Foto de Juan Manuel Castro Prieto)

16 comentarios:

Carme Sala dijo...

Ya me parece un buen final de día, si al final has logrado restablecer un poquito tu equilibrio, para poner tan bien puestas éstas 4 palabras juntas.

Te has ganado un reposo reparador.

Si no me contestas hoy, me alegraré por ti. Quizás te hayas quedado dormida.

Bonanit pesoleta :-)

Ana, princesa del guisante dijo...

*Mevamaleta: parece que la televisión no va a servir para aportar nada bueno a mi día, así que sigo aquí, buscando un poquito de luz. Y voy, y te encuentro a ti. Es un buen día, ¿lo ves?
Un petonet, reina.

N. dijo...

Pues que sepas que has estado a punto de recibir una llamada de una vieja amiga desesperada en busca de consejo. Ha estado dudando desde las seis de la tarde sobre la inconveniencia de una llamada de socorro y al final ha decidido que era una desfachatez hacerlo antes de saber la situación ajena. Ahora se alegra de no haberlo hecho. a las ocho, cuando ha acabado sus tareas tú ya estabas desconectando. Hubiera sido inoportuna....

Besos, Ana, y gracias por la canción, te dejo aquí, reflexionando :-)

Ana, princesa del guisante dijo...

*N: Muy mal decidido: yo sé hablar por teléfono mientras plancho... ¡no soy un hombre, tengo dos neuronas o tres!
¿Resistirás hasta mañana?

N. dijo...

Problablemente. Cada día pienso que ya no doy más y ahí sigo...resistiendo

(No me imagino un hombre planchando y hablando por teléfono a la vez. De hecho el ejemplar de hombre que tengo más a mano cuando habla por teléfono se tumba, debe ser pa concentrarse mejor :-D )

Tita dijo...

Buf, qué estrés!

Admiro tu capacidad de escucharte, yo estoy aquí, alimentándome de vuestras palabras incapaz de escuchar las mías propias para escribir...

tomae dijo...

uf!! ya llego Princesa Del, hoy me ha tocado limpiar el cenicero, buff...con lo gracioso que está encolillado!!! ;)

sunsi dijo...

Te he imaginado como el conejito del reloj de "Alicia en al País de las Maravillas". Trepidante ...a galope...

Y llega la hora en la que se acuestan y hay un poco de paz...y de silencio. ¿Mejor? Una buena zambullida en el blog. Sola tú y tus pensamientos. Alivio...

Un beso, Princesa

Unknown dijo...

Princesa, por un momento pude captar el olor a pimentón de tu cocina...
Me alegra saber que en castillo tienes un lugar para la evasión, aunque de fondo escuches el ruidillo del lavavajillas...

Por cierto, yo tampoco me imagino a mi seductor planchando y hablando por teléfono a la vez... jajajaja, de hecho le pasa como al ejemplar de N. que necesita tumbarse o paralizar el mundo cuando habla por teléfono.... Ayyyy cuando daño hizo la genética!!! jajajajaja, es broma eh!

Biquiñoss

Itsaso dijo...

Hay días en los que tienes la sensación de no haber parado ni un minuto, el trabajo, los niños, la casa... la cena... y cuando llega ese momento de paz, de silencio y de tranquilidad... es como si volviera a encontrarte contigo misma y te dijeras "Hola Itsaso, ¿qué te apetece que hacer hoy?".
Es cuando aprobecho para charlar con mi marido o hacer mis manualidades. Son dos horas que me dan equilibrio en esta locura de vida de madre trabajadora...

Ana, princesa del guisante dijo...

*Tita: cuando mis hijos tenían la edad de los tuyos yo ni siquiera sabía que tenía voz. Dáte tiempo. Besos

*Tomae: Lo habrás dejado como una patena, supongo...


*Sunsi: me da rabia no poder tener más tiempo para ellos, ni para mis aficiones. Todo se andará. Besos

*Dolores: cuando tus hijos sean un poquito mayores, verás la diferencia, seguro. n beso

*Itsaso: es poco tiempo, pero sabe a gloria :-)

Mariapi dijo...

Ana, hay días que las horas tan ocupadas nos hablan por dentro, pero como lo hacen a "grito pelao", no entendemos esa voz interna hasta que tenemos un poco de silencio...pero estoy segura que "tu día", te ha dejado muchos mensajes...y sabes escucharlos.

Un besico.
(Ah, a mi planchar es de las cosas que más me hacen "escuchar", curioso...)

Ana, princesa del guisante dijo...

*Mariapi: es que mientras planchaba, escuchaba mi programa de radio favorito... no doy tanto de sí :-)
Hoy tengo mi "contestador" llenico de mensajes por responderme. Y tampoco tengo tiempo. Ays.

MadreYMas dijo...

Ay, ay, ay.... esa ha sido mi sensación esta semana!
Los preparativos de un viaje con Criatura casi acaban conmigo!

A estas horas, y aún no tengo terminadas las maletas...

Y sin embargo, no sé por qué, esta semana he estado más prolífica que de costumbre en el blog y se me ocurrían muchos temas que, por falta de tiempo, ni siquiera he podido desarrollar en el blog....

Ánimo y escucha mientras ruge la lavadora... seguro que algo descubres...

Marina dijo...

Claro que ha sido un buen día, no tengas ninguna duda.
Un beso cielo.

Ana, princesa del guisante dijo...

*MadeYMas: No podrán con nosotras, ¡ánimo, linda!

*Marina: En el fondo sabes que ha sido un buen día, lo que pasa es que no sabes muy bien para quién :-)

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