© de la imagen La meva maleta

lunes, 16 de enero de 2012

Una semana



A partir de este momento te planteas seriamente hacer algunos kilómetros para verle.

No podrá con tu alegría, te dices, pero quisieras poder salir a la calle sin ese peso suave sobre tu mirada, quisieras sentir la luz reflejada en las fachadas, devolviéndote tu sonrisa y pasear con tus hijos sin pensar en volver al cabo de un segundo.

La gente del lugar, tu gente, te dice que es normal, que es el tiempo del mal tiempo, pero a ti te gustaría otro tipo de frío. Aunque es cierto, la nieve es peor.

Una semana de niebla, una semana sin sol. Dicen que volverá el miércoles, podré esperar.

10 comentarios:

Unknown dijo...

Ánimo, mientras, piensa que la foto de tu post de hoy es preciosa... jajajajaja
Por cierto, ayer pensé mucho en tu amiga, aunque no supiera comentarte.
Biquiños.

Carme Sala dijo...

A mi también me conforta mucho ese liviano peso en mis párpados...comprendo perfectamente a las lagartijas, capaces de esperar pacientemente a que sus rayos calienten su sangre. Me imagino que yo debí ser un de ellas en otra vida...¡seguro! :-)

Paciencia; no nos queda otra y mientras tanto imagina qué suerte la tuya por no haber nacido en Finlandia...

Susana dijo...

La verdad es que no comprendo cómo los nórdicos soportan esto todo el año. Con razón vienen a España de vacaciones. Un beso.

Ana, princesa del guisante dijo...

Leles: creo que voy a correr las cortinas para no ver lo que hay fuera... ¿y si pongo un póster en las ventanas? Lo de mi amiga, es difícil, yo tampoco sé muy bien qué decir. Besos

Ana, princesa del guisante dijo...

Si yo hubiera nacido en Finlandia no habría llegado a los dos años... La teoría de mi marido es que tengo el termostato estropeado :-)
Kisses

Ana, princesa del guisante dijo...

Los pobres nórdicos que vienen a España y se van a bañarse en la playa con el agua a 12 grados, y la encuentran "bien"... Ay. Besos

TC dijo...

Me he acordado de ti todos estos días cuando veía por la tele que estabais cubiertos de niebla. Yo lo único que te puedo ofrecer es que te vengas a mi castillo unos días hasta que cambie de nuevo el tiempo, jeje.

Mariapi dijo...

Bueno, Princesa, esto pasará pronto, piensa que cada día el sol aguanta un poquico más...en un plis...en agosto. (Conste que te doy ánimos en mi contra...soy de otoño-onvierno). Besos.

Ana, princesa del guisante dijo...

Cuidado con la oferta, que somos 4 de dos patas, los dos gatos, el conejo y los dos periquitos :-)))

Ana, princesa del guisante dijo...

Ay... ayer me puse ¡¡dos minutos!!! las gafas de sol, y ahora para compensar, no veo el otro lado de la calle... Yo en realidad prefiero las estaciones intermedias, pero aquí no existe ese concepto. Besicos

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