© de la imagen La meva maleta

jueves, 10 de febrero de 2011

El acosador

Se le vio en el pueblo poco antes de las tres. Según la versión de los niños de 4º, molestó a la niña nueva. En nuestro pueblo no hay servicios de seguridad propios, así que, desde la denuncia, un coche de los Mossos (la policía Autonómica) se pasea constantemente por las calles para disuadir al hombre.
Los niños que le vieron sólo pueden decir de él que lleva un gorro y una camisa de cuadros.

Mis hijos no van solos por la calle, a pesar de que vivimos en un lugar seguro, y que todas las distancias son cortísimas. Alguna vez, Marlin ha ido a casa de nuestros tíos, que viven dos calles, o al kiosco, apenas un poco más allá. O a casa de su abuela, nada, a 300m.

Ahora no podrá ir solo. Hasta que pase el susto. O hasta que se resuelva definitivamente.

He aprovechado para explicarle algo que no había salido hasta ahora: si alguien te molesta por la calle, hazte oír y ver. Grita, métete en la peluquería, o en la panadería, o llama a todos los timbres. Está claro que no vamos a dejarle salir sólo en horas inapropiadas, y no vamos a correr riesgos innecesarios.

No sé si será suficiente, espero que su propio miedo ayude. Porque el mío no puedo trasladárselo. No puedo quitarme de la cabeza el hombre sentado a mi lado en los columpios, en una plaza solitaria a la hora de la siesta. Yo cuidaba de mi hermana pequeña, ella tal vez con 4 años, y yo con 11. No recuerdo exactamente sus palabras, pero sí que se me heló la sangre, y que supe con certeza que tenía que ponernos a salvo. Sigo guardando en mi memoria el peso de la responsabilidad que sentí.

19 comentarios:

mOnTy @holasomos7 dijo...

uuffff Ana, hoy voy de atraganto en atraganto hoy ..
Ana, esto te quieta el hipo al momento. Me ha venido a la cabeza mi historia de acoso y esa bendita señal de alarma que te dice: huye.
Ultimamente me ocupan y preocupan las plazas virtuales. Los acosos en la red son cada día más fáciles y ell@s (de 7 años en adelante) apenas saben manejarse, ni defenderse en la calle. ¡Pelos de punta! Un petó

Carme Sala dijo...

No es bueno confiarse demasiado. El miedo puede salvarnos el pellejo, y hacernos ser más precavidos.

Yo también sufrí varias experiencias de este tipo, cuando era pequeña y empezaba a salir sola de casa (muchísimo antes que mis hijas) y aprendí a no confiarme nunca.
Hoy todavía, si voy por la calle y está oscuro, aprieto el paso cuando noto que alguien me sigue detrás.

Todos los consejos sobre seguridad que les das a tus hijos, son necesarios y aún a riesgo de parecer exagerados, siempre pueden ayudar a ir con los ojos bien abiertos y estar en guardia.
Yo hago lo mismo que tú pesoleta.

Bien hecho.
Un petonet.

mOnTy @holasomos7 dijo...

Sinceramente: es bueno que sepan pasear por la calle, primero con nosotros para ir educándoles el olfato, y solos.. Lo de los horarios es clave. Pronto se pasa el susto. Petons.

Itsaso dijo...

uff... Con eso sí que no se puede jugar, solo pensar en ello me pongo a temblar... Siempre piensas, ¿cuándo será el momento en el que le dejaré ir solo por la calle? Pero visto lo visto creo que si fuera por mi nunca. Un beso y ánimo.

Ana, princesa del guisante dijo...

*Monty: a mí lo que me da miedo es que en el momento de huir el miedo les paralice. Qué miedo, qué indefensión, pobrets nens...

*Mevamaleta: prefiero pasarme de histérica y que desconfíen de todo el mundo. Un besito, guapa

*Itsaso: las calles en los pueblos muy pequeños muchas veces están desiertas... qué miedito. No sé cómo se vive en los lugares más grandes. En fin. Un beso

Dàmaris Garcia dijo...

Madre mía qué miedo. Con lo desconfiada que soy yo... como para que spasara esto por mi pueblo. no lo dejo ir solo ni al lavabao, ejjeje. Estoy exagerando, por supuesto, pero ya me entiendes.

Tita dijo...

¡Que miedo, Ana!

Dicen que las calles no son lo que eran, pero tienes razón, yo también de pequeña escuché la alarma también alguna vez. Ahora cuando veo niños muy pequeños solos por la calle me echo a temblar. Igual que los veo yo, los ven solos quien no deben, y están más expuestos...

Abrazos

Fátima Casaseca dijo...

Hola Ana,

Escribí unas entradas en mi blog sobre este tema en particular (Nunca hables con extraños, se llaman), porque me leí unos libros sobre el miedo y la mejor manera de proteger a nuestros hijos cuando ocurran cosas así... SI quieres echarle un vistazo a los artículos, hay algunos links interesantes al autor de los libros (que recomiendo a TODO el mundo).

Ana, princesa del guisante dijo...

*Dámaris: tus hijos son muy pequeños, como los míos, no se te ocurre siquiera que vayan a salir solos a ningún sitio. Yo apenas empiezo, y se me ponen los pelos de punta. Un abrazo

*Tita: siempre ha habido gente con malas intenciones... hay que educarles para que sepan detectar los momentos peligrosos. A mí me da miedo, también salir a horas intempestivas. Un abrazo

*Mama en Alemania: me voy de cabeza a tu blog, me parece interesantísimo, necesito herramientas para educar. Un abrazo, y gracias

Unknown dijo...

Este es un tema que aun no me planteé, puesto que mis peques son unos bebés. Miedo me dá.
Las calles no son lo que eran, ni las ciudades, ni las personas...
Un bico pesoleta y ánimo.

sunsi dijo...

Ana... ¡Mucho cuidado! No solo en las calles...también en grandes almacenes, súper hipermercados... No quiero ser agorera. Pero lo malo que anda suelto -muchos son enfermos- se ha triplicado y me quedo corta... Y hay hijos que son como Juan-sin-miedo. Es bueno,sin exagerar, que tengan un instinto de alarma. Y , si me apuras, también mucho cuidado con grupos de chicos jóvenes... cuando van en pandilla...

A veces es difícil acertar con ese término medio entre la sobreprotección y la negligencia. Pero no están los tiempos para bromas...

Un beso, pesoleta.

Ana, princesa del guisante dijo...

*Dolores: pues cuidadín con lo que dice Sunsi, que a mí también me obsesionaba: no les pierdas de vista ni un segundo en los supermercados... Un abrazo

*Sunsi: estoy de acuerdo contigo. Prefiero pecar de previsora. Un abrazo

Hele dijo...

yo me crié en un pueblo pequeño, muuuuy pequeño, de esos en los que no te va a pasar nada y desde niño puedes salir a jugar en la calle porque ni hay gente mala, ni coches que te atropellen, apenas 100 habitantes, para que os hagais una idea (ahora, por desgracia, no llega ni a la mitad).

Fue una parte muy importante de mi vida, de la que estoy orgullosa, crecer en ese ambiente ha marcado claramente mi personalidad, es por eso que confio en la gente y hablo con todo el mundo (alguna vez mis amigas me han regañado por no pasar de largo cuando alguien me habla en la calle, sobre todo si ese alguien es un mendigo o un anciano, si es un jovencito de buen ver, se paran ellas, pero no creo que subestime el riesgo, en cuanto la cosa empieza a no gustarme, o veo que hay algo que no cuadra, tengo caracter para parar un tren.

POr eso me da rabia que los niños de hoy en dia tengan que crecer encerrados, no ya en las grandes ciudades, donde hay tráfico o se pueden perder, sino también en los pueblos (el tuyo seguro que es mas grande que el mio, pero no debe ser muy grande),la calle debería ser sólo de los "bueno", los malos ya sabemos donde deberian estar.

Espero que pillen a ese tipo

Ana, princesa del guisante dijo...

*Hele: Siempre ha existido el acoso a los niños. Antes se evitaba porque siempre había una abuela detrás del visillo, pero ahora, parece que vivimos los unos de espaldas a los otros. Es triste. Yo también espero que le pillen.

tabata dijo...

Nada mas leer tu post me he acordado de un vídeo que vi hace unos meses en las noticias, en el que desde una cámara de seguridad se había grabado el secuestro de una niña a la que una profesora la llevaba al final de "una cadena de niños" esos que van de la mano y en el vídeo se ve como un hombre sale de un arbusto y se lleva a la niña que iba a la cola, gracias a Dios una historia con final feliz porque la encontraron.
Yo como mama puedo decir que inculcaré a mi hija lo que me inculcaron en casa, que es tener mucha precaución, no fiarme de nadie que no conozca e intentaré desarrollar ese olfato en mi niña, eso si, espero no convertirme en una neurótica, aunque en los tiempos en los que vivimos quien no lo hace?

Un abrazo ana, y ten mil ojos estos días, espero que solo se quede en un episodio traumatico y que podáis aprender mucho de este acontecimiento.

Lidia- Agente Comercial Thermomix dijo...

Uisss,en que mal momento he pasado por aqui, esta tarde mi hija ha quedado en casa de una amiga y se ha ido andando por primera vez. Tiene ya 15 años, se que no es pequeña pero estaré nerviosa hasta que me llame.

Ana, princesa del guisante dijo...

*Tabata: mira no me asustes que para ir del cole al polideportivo van en fila de a dos. Ays... ojos ojos ojos. Un abrazo y gracias-. Bienvenida al castillo.

*Lidia: no quería darte susto, pero no está de más que a veces nos recuerden que son vulnerables. Cualquier precaución es poca. Un abrazo, y que te llame prontito

METAMORFOSIS dijo...

Espero que todo pase cuanto antes....pero a mí, aunque no tengo hijos por ahora, es la gente que acosa, no ya a menores....sino a cualquiera que se tercie....a traves de la red....este instrumento tan favorable para unas cosas y que da tanto aninimato para otras....donde se esconden y parapetan gentes de lo mas viles y que luego en su casa y en su vida cotidiana son perfectos padres de familia.....pero que cuando se ponen delante de un ordenador son unos "criminales" de lo peor....así que atentas tambien a la moda de las redes sociales y a todos los datos que allí se ponen a la vista de todo el mundo.
Un besote

Ana, princesa del guisante dijo...

*Metamorfosis: los acosos de la red están ahí. La red no deja de ser un reflejo de todo lo demás. Hay gente buena, gente mala, gente regular y gente que se dedica a acosar. Está en nuestro ejemplo también; si pecamos de exceso de confianza nos pueden pringar. Un beso

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